miércoles, 22 de julio de 2020

Jorge Loarte

Conforme se va acercando el final de este año, resumo la última década como una coctelera donde metí lo mejor y lo peor de mí mismo. En este blog, expuse buena parte de relatos que, entre ficción y realidad, mostraron la delgada línea que hubo entre mi yo motivado y mi yo desganado. Sin embargo, ganó lo primero y pude dedicarme a mi puesto como redactor en una web especializada en cine y música. Además de ello, afiancé varias relaciones con el mundo de las editoriales (para la publicación de mis próximos libros) y logré hacer de mis textos algo rutinario. Por ello, siento la necesidad de ir cerrando frentes a los que no podré dedicar tiempo. Me refiero a espacios donde me leéis pocas pero muy selectas personas, como este blog.

Este año, marca el final de la nostalgia y el principio de una aventura, espero que nocturna y llena de aguijones. Sin picaduras, esto sería muy aburrido.

Un abrazo a tod@s y salud,

Jorge Loarte